Billy Hayes (Brad Davis), un joven estadounidense, es detenido en el aeropuerto de Estambul cuando se dispone a subir a un avión con varios paquetes de hachís. Acusado de uno de los delitos más graves en Turquía, Billy es condenado a cuatro años de cárcel, donde sufrirá terribles penalidades en un sistema penal brutal e inhumano.