Alex tiene veintisiete años, vive de la venta de hachís y paga las deudas de su hermano Isaac quién, después de haber sido su apoyo, se ha convertido en una carga para él. Así que cuando su primo le anuncia que va a abrir un restaurante en Tel-Aviv, Alex sueña con ir allí para poder finalmente cambiar de vida. Decido a irse, Alex tiene que encontrar el dinero y hacer su Alyah. Pero también tiene que dejar París, a la que ama tanto, a Esther, su antiguo amor, a Mathías, su amigo de siempre, y a Jeanne, que acaba de conocer. Atrapado entre su Alyah, la venta de droga, sus amores complicados y un hermano destructor, Alex tendrá que encontrar su camino.