Charlotte tiene quince años y cree que la relación de sus padres es perfecta. Por eso es todo increíblemente sorprendente para ella cuando se separan. La separación de sus padres es para ella la primera lección de la vida sobre cuan doloroso puede ser el amor. Charlotte tiene entonces que mudarse e ir a un nuevo instituto. Allí conoce a dos chicos, Sulzer y Carlo, dos buenos amigos. Mientras que Sulzer es un casanova superficial al que las chicas adoran, Carlo es justamente todo lo contrario. Su trascendental encuentro convierte a los tres en amigos inseparables. La cuestión es si el amor no se oculta tras la amistad que hay entre este trio.