Hilary (Julia Roberts) es una atractiva joven que ya casi ha renunciado al amor, y el resto de su vida tampoco va demasiado bien. Un día decide contestar a un anuncio en un periódico, en el que se solicita una chica atenta y servicial. Acude a una lujosa mansión, donde conoce a Victor (Campbell Scott), un joven de buena familia que padece una leucemia que todos creen incurable, incluido su dominante padre (David Selby).