Aída ya no aguatan más el pasotismo de su hermano y decide ponerle de patitas en la calle. Refugiado en un banco, su actitud será emulada por un grupo de 'hippies'.Harta de ver cómo su hermano se escabulle a la hora de realizar las tareas del hogar, Aída decide echarle a la calle. Desahuciado, Luisma se topa con dos hippies que, al verle postrado sobre la acera, le confunden con uno de ellos y comienzan a ensalzar su compromiso con la lucha contra el cambio