El juez Orozco le da una segunda oportunidad a Capote, así que le devuelve su placa y su arma. El periodista Félix González le pide al detective buscar información sobre el contador Ríos, mano derecha de Matallana. Al enterarse de que Capote está investigando sobre Ríos, el abogado hace creer a la opinión pública que el contador le robó objetos de valor de su oficina y sus clientes.