La grotesca visión del personaje con enormes dildos en lugar de manos, y sus aventuras al lado de su enamorada, la mítica Jeanna Fine, se convirtieron en un éxito inmediato. A pesar de no contar con un duro en su prespuesto, se las apaña para parodiar las escenas claves y hasta añadir algún extra mítico. Es la primera de una trilogía.